El sector está viviendo un cambio, que promueve la desinstitucionalización, este modelo de atención centrada en la persona propone nuevos roles, con nuevas funciones y competencias para los trabajadores sociales y de los cuidados.
Están surgiendo nuevas necesidades de formación debido a la evolución tecnológica que se está desarrollando para actividades de cuidados como teleasistencia, telemedicina, instalación de sensores e Internet de las cosas; la domotización de los alojamientos o viviendas y la utilización de dispositivos robóticos.
Es imprescindible que los profesionales de diferentes áreas actúen de forma coordinada como un equipo multidisciplinar y son necesarias competencias de coordinación, integración y trabajo en equipo.
El informe El empleo en España en el sector de los cuidados de larga duración aborda el sector de los cuidados de larga duración centrándose en dos colectivos: las personas mayores dependientes y las personas con discapacidad.